¡Equidad para todos! La transformación requiere valentía y determinación, ya que no es un camino fácil. Aquellos que se atreven a desafiar las normas de la inequidad e injusticias son a menudo criticados, despreciados e incluso perseguidos por aquellos que se benefician del sistema corrupto y perverso.

 

Sin embargo, es importante recordar que la transformación es necesaria para construir un mejor país, donde se respeten los derechos de todos los ciudadanos y se promuevan la justicia, la equidad y la igualdad. No podemos quedarnos conformes con un sistema que perpetúa la injusticia, debemos tener el coraje de levantar la voz y luchar por un cambio real.

 

Aquellos que están dispuestos a enfrentar las dificultades y los obstáculos en el camino de la transformación serán los verdaderos agentes de cambio, ¡son los hombres y mujeres inquebrantables! Son quienes construyan un mundo mejor para las generaciones futuras, donde la corrupción y la opresión sean cosa del pasado.

 

La resistencia no vendrá del exterior, sino del interior de la misma institución. Ellos, cegados por el odio y la envidia, intentarán derribar a los hombres y mujeres inquebrantables y borrar toda huella y pisada de las acciones heroicas. Sin embargo, no podrán borrar las luchas y batallas de la transformación.

 

Así que les invito a todos a unirse a esta lucha por la transformación, a no tener miedo de alzar la voz y a trabajar juntos para construir un país donde prevalezcan los valores y principios fundamentales. ¡Recordemos que la transformación no es para hombres débiles! es para hombres y mujeres valientes que desean un futuro mejor.

 

Un día, los hombres y mujeres inquebrantables devolverán a su institución la dignidad, el honor, la equidad y la justicia. Todos ellos, sus nombres estarán escritos en los libros de la historia como los verdaderos conquistadores y transformadores de un mejor país y una mejor institución.  

 

¡Sigamos adelante en este camino de transformación y construyamos un país que todos merecemos!"